sábado, 29 de junio de 2013

Ni tú eres Aquiles, ni yo una puta tortuga.

Se enamoró de Aquiles la Tortuga
y fingió huir de él para atraerlo.

Cuenta el cruel Zenón que esa tortuga
no perdió nunca la virginidad.

Pero Cantor,
Bolzano,
... Weierstrass,
rehabilitaron para siempre al héroe.

Otra versión (no menos conocida)
asegura que éste no alcanzó a la Tortuga
porque el tendón de Aquiles se torció en la carrera.

Ulalume González de León.